Hemos estado realizando varios juegos para niños, sobre el
pulso. El profesor nos marcaba un pulso y teníamos que movernos por el espacio,
siguiéndolo y marcándolo con nuestros pasos.
A continuación, hemos hecho lo mismo pero con una pieza
musical. Esto resultaba más complicado, puesto que no es lo mismo que estén
marcando el pulso todo el rato, que tener que estar pendiente de ello
continuamente, para no perderte.
Para realizar este ejercicio, el profesor nos ha recomendado
utilizar piezas musicales barrocas, ya que tienen un tempo cambiante y se ven
las variaciones en intensidad.
Después, hemos hablado sobre los conceptos musicales: pulso,
tempo y ritmo.
El pulso es la división del espacio-tiempo en partes
iguales. El tempo es la velocidad del pulso. El ritmo es todo aquello que se
encuentra entre dos pulsos, y podemos encontrar tres tipos de ritmos:
- Ritmo pulsar: coincide con el pulso.
- Ritmo subpulsar: dura menos de un pulso.
- Ritmo suprapulsar: dura más de un pulso.
En la música comercial, el pulso siempre se oye, el tempo es
muy parecido en todas, y el ritmo siempre es el mismo. En cambio, en el arte
musical, el pulso no siempre se oye, el tempo suele ser distinto en cada pieza
y el ritmo no siempre es el mismo.
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